¿Entendés?

Todo tan claro como dos mas dos es cinco, como peon cuatro alfil rey, como la última oración de un cápitulo cualesquiera. Ni nihilismo ni desconcierto, en absoluto. La otredad es nuevamente cerrar los ojos, respirar profunda y lentamente mientras los silencios que ningun pentagrama puede prescindir forman la melodia aleatoria pero exacta, unica y destinada, para entender. Y es entonces cuando es claro; el destino.
No existe el libre albedrío, no es factible equivocarse, todo es causalidad. Despues de todo no es dificil darse cuenta que no podría haber sido de otra manera. Estamos donde estamos, porque no podriamos estar en otro lugar, hacemos lo que hacemos porque es lo que tenemos que hacer, no hay vueltos que no se lleguen a cobrar.
Y seguramente exista una explicación matemática para todo esto, una de esas explicaciones que no explican nada, no se trata de complicar las cosas... pero los "humanos" siempre nesecitan explicar lo inexplicable. La sombra de la sombra de lo perdido se refleja en el oscuro espejo del porvenir... y nos espera, paciente, calma, segura de triunfar... como dos mas dos es cinco.