8. Jermión y Chiboka: Guardianes del Primer Tiempo

 

<<Tiempo detenido: 25:00>>
<<Certificación multiversal: EN CURSO>>
<<Track de fondo: *“Signals from Gecko” – Gustavo Cerati [no publicado, no compuesto, pero perfectamente audible]>>

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[Imagen]:
La galera se cierra detrás de Alan.
Todo se detiene.
No porque haya terminado, sino porque está siendo auditado.

La Bolsa Galáctica queda en pausa.
Los gráficos flotan inmóviles, como peces congelados en una pecera sin agua.
Y entonces…
aparecen ellos.

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Jermión:

Un ente sin forma fija.
Solo se expresa en sonidos de fax antiguo:
— krrrrKKKKkk–zzZZZZZttT–beeep...

Sus bordes se pixelean.
Está hecho de papel térmico y protocolo.

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Chiboka:

Una criatura aromática.
No habla.
Emana esencias.
Su presencia huele a:

• pan tostado con miedo,

• lavanda de infancia no vivida,

• y ozono de disolución emocional.

Traduce todo lo que Jermión faxea.
Lo hace con olores.

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[Diálogo sensorial]:
— krrKKzzzzTTT (dice Jermión)
→ Traducción de Chiboka: “Este viaje no es delirio.”

— zzttt–beepp–zzRRRrrk
→ “Está en fase de mercado emocional.”

— kkkt–kkkt–beeep–beeep
→ “Todo está certificado.”

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[Sistema universal]:
<<AUDITORÍA DE TIEMPO – 25:00 CONFIRMADO>>
<<ESTADO DEL RELATO: AUTORIZADO PARA CONTINUAR>>

Alan asiente.
No porque entienda, sino porque lo siente.
Gecko, en algún rincón, también asiente.
DulceGKali parpadea en la cangurera con un brillo de aprobación.

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Y justo cuando todo parece volver a girar,
Chiboka exhala un aroma a nuevo comienzo
y Jermión imprime una última línea:

🧾
— Validación completada. Primera mitad del alma registrada.

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[Cierre de escena]:
Una vela en el gráfico vuelve a moverse.
Solo una.
La del conejo J9.

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